Unicaja ha emitido en los últimos dos años (2022 y 2023) bonos verdes por un total de 1.300 millones de euros, que han contribuido a evitar la emisión equivalente a un total de 54.791 toneladas de CO2.
Para el cálculo de este impacto se ha empleado una metodología basada en estándares y directrices de alcance internacional, desarrollada por el asesor externo Ecodes, asegurando la objetividad y comparabilidad de los datos, y DNV ha sido el verificador independiente.
El objetivo de la entidad es contribuir financieramente al desarrollo de una sociedad más justa e integradora, apoyada en una gestión económica eficiente y respetuosa con la preservación del medioambiente, favoreciendo la progresiva reducción de las emisiones de CO2, tanto propias como de la clientela.
En concreto, en estos dos años Unicaja ha ejecutado una emisión de tres bonos verdes relacionados con proyectos de energías renovables y de edificios verdes. El primero, un bono verde sénior preferente, por importe de 500 millones euros, fue colocado a mercado el 30 de junio de 2022, año en el que también emitió el segundo (sénior no preferente); en concreto, el 11 de noviembre y por el mismo valor. El 11 de septiembre de 2023 se llevó a cabo una tercera emisión adicional (un bono verde sénior no preferente), por 300 millones de euros.
Los bonos verdes se destinan a la financiación o refinanciación de proyectos verdes; es decir, inversiones en activos sostenibles y socialmente responsables en áreas como las energías renovables o la eficiencia energética, entre otras.
Así, en el caso de Unicaja, los proyectos elegibles apoyan la generación de electricidad a partir de las energías solar, eólica, hidráulica, geotérmica, hidrógeno y bioenergía, incluyendo la adquisición, construcción, operación, mantenimiento o repotenciación de instalaciones.
También se contemplan actuaciones que promuevan la adquisición, el desarrollo y la construcción de edificios, así como proyectos de renovación de inmuebles destinados a mejorar su eficiencia energética (calefacción urbana, redes inteligentes o medidas de renovación eficiente).
El Marco de Bonos Verdes de Unicaja, aprobado en 2022 y revisado en 2024, está alineado con los Principios de los Bonos Verdes (GBP, por sus siglas en inglés) de la Asociación Internacional del Mercado de Capitales (ICMA), publicados en junio de 2021.
Impacto medioambiental evitado de los bonos verdes
Los proyectos asignados a cada uno de los bonos verdes emitidos por Unicaja son, en total, 3.277, relacionados con energías renovables y edificios verdes, por un importe global de 1.300 millones de euros y que representan un impacto medioambiental de 54.791 toneladas de CO2 evitadas, así como una energía anual generada de 452.653 megavatios hora y una capacidad instalada de 623 MWP.
De ese total de proyectos asignados, 3.234 están relacionados con edificios verdes, cumpliendo así los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas números 7 (Energía Asequible y No Contaminante), 11 (Ciudades y Comunidades Sostenibles) y 13 (Acción por el Clima), y representando un importe global de 815 millones de euros y 302 toneladas de CO2 evitadas. A estas iniciativas, se suman otras 43 relativas a energías renovables (ODS 7 y 13), por 486 millones de euros.
En cuanto a estos últimos, 32 proyectos corresponden a energía fotovoltaica; 9, a termosolar, y 2, a eólica, con un importe total asignado de 486 millones y una potencia instalada de 623 megavatios, que han permitido generar al año 452.653 megavatios hora y evitar la emisión equivalente a 54.488 toneladas de CO2.
Entre los proyectos asignados a los bonos verdes de Unicaja, se encuentran una planta termosolar en Badajoz y un parque fotovoltaico en Plasencia (Cáceres), así como financiación hipotecaria para viviendas (promoción y adquisición), con certificado de eficiencia energética A.
Compromiso con la sostenibilidad
El compromiso de sostenibilidad de Unicaja se refleja en la forma en la que desarrolla su actividad, manteniendo su permanente responsabilidad y atención a las necesidades de sus clientes, accionistas, empleados y otros grupos de interés, así como a las demandas económicas, ambientales y sociales de las zonas y territorios en los que opera. De hecho, el propósito de la entidad es ayudar a las personas a prosperar.
Precisamente, uno de los compromisos de la entidad es la integración de la sostenibilidad en todas sus líneas estratégicas. El acompañamiento de los clientes en la transición energética es una de sus prioridades y, en esa apuesta por la financiación verde, ha desarrollado una completa oferta de productos de financiación sostenible que contribuyen a la mitigación o a la adaptación al cambio climático.