Unicaja ha firmado un convenio con el Ayuntamiento de Laredo para colaborar en la celebración de la Batalla de Flores, una Fiesta de Interés Turístico Nacional que celebrará el próximo 30 de agosto su edición número 113. Cada año, monumentales carrozas, que representan diversas alegorías y están cubiertas por completo de flores, recorren la Alameda de Miramar en un espectáculo único.
El alcalde de Laredo, Miguel González, y el director territorial Norte de Unicaja, Luis Manuel Taboada, han rubricado el acuerdo por el que la entidad financiera se compromete a dar su apoyo para la organización de esta fiesta que, cada año, reúne a miles de espectadores. El convenio recoge que el segundo premio de la categoría principal que otorgue el jurado se denominará ‘Premio Unicaja’.
Según Taboada, para Unicaja es “de gran importancia” colaborar con aquellas manifestaciones culturales “de tanto calado y arraigo en la sociedad”, como es la Batalla de Flores. “Nuestra entidad está comprometida con los proyectos que generan beneficio en sus territorios de actuación y, en este caso, en Cantabria como una de sus regiones de origen”, ha explicado.
Por otro lado, González ha mostrado su agradecimiento a dicha entidad por apoyar la celebración más emblemática de la villa pejina asegurando que esta ayuda “servirá para impulsar aún más la fiesta”. “Esta colaboración mejorará la imagen y notoriedad de la Batalla, del Ayuntamiento y de Unicaja, reforzando al mismo tiempo nuestra cultura y tradición”, ha afirmado.
La fiesta del millón y medio de flores
Surgida en 1908 a orillas del mar, cada año, a finales de agosto, monumentales carrozas cubiertas en toda su superficie por miles de flores desfilan ante la mirada de miles de vecinos y visitantes.
Durante el desfile, a lo largo de la Alameda de Miramar, público y participantes entablan una amistosa contienda con confetis, mientras el jurado delibera sobre los premios a otorgar a las distintas alegorías presentadas.
La Batalla de Flores de Laredo reúne creaciones que se superan, año a año, en complejidad. Cada una de las carrozas puede llevar entre 150.000 y 180.000 flores naturales, clavadas una a una sólo horas antes de salir a pista